8º Un estremecimiento recorre todo el cuerpo de Miss Polly, pero no es de placer, es de horror, pues percibe la presencia de Latour en el salón. Por el lado de su abuela materna Doña Dorotea Errázuriz Morla, heredó ciertas capacidades sobrenaturales para contactarse con los muertos, sea por los sueños, la ouija (rendija, la madre y tu hija) o la mítica mesa de espiritismo de las Morlas, antigüedad diabólica hecha con nueve maderas mágicas distintas, con forma de octógono, base de tres patas de cabra y una pentagrama incrustado en su complejísima ebanistería. La misma mesa a la acudían los espíritus de la Quintrala, la Teresa Willms Montt (pobrecita) y de Vicente Huidobro (aunque él no estaba nada de muerto). Bueno, ella jura que el viejo chico y beodo de Latour, que por el lado Subercaseaux es familiar de las Morla y por tanto de ella en algún grado de consanguinidad (como todos en realidá), está observándola, pero como eran tan amigos, no cree que le desee mal, más sí que le quiere decir algo con el libro rojo. Se le pasa el miedo, se concentra y sigue revisando las imágenes pasando a una muy curiosa. Es una versión de la escultura helenística de “El niño de la espina”, pero esta era una versión incompleta en mármol como la que hay en los Uffizi en Florencia y no de bronce como la de Roma, ponte tú. Pero a este pobre niño que le faltan un brazo, una pierna y el pedestal para sus posaderas, le brotan del cuerpo unos pinchos metálicos terribles, que son como unas púas triangulares que le salen del pecho, del muñón de la pierna y desde la nuca con las que se estabiliza sobre el piso y le da apariencia de araña... le recuerda las esculturas de esa viejita famosa, ayyy como se llama... ¡La Bourgeois! pero la vieja trasnochada era muy hippie y esto es más postmo y chic...mmm... ¿tendrá algo que ver con la piedra de locura del Bosco? Al niño le falta parte de la cara y cabeza dejando un hoyo negro como si le hubieran trepanado el cráneo ¿es el mal que brota de su cuerpecito?... ¡Amebus! ¡Si estás aquí manifiéstate, te invoco! ¡Necesito respuestas!... Exclama provocando el eco de su voz en la desolada nave.
Continuará...
(The Boy with Thorn, Gregor Gaida - 2013)
